Quiñones de León, Severiano Martínez Anido y la alternativa monárquica de la sublevación militar de 1936

Resumen

Las instrucciones particulares del general Emilio Mola Vidal para la sublevación de julio de 1936 establecían un plan centrípeto, mediante el cual las divisiones del Ejército debían converger sobre Madrid tras la declaración del estado de guerra. Sin embargo, la muerte del general Sanjurjo, el 20 de julio de 1936, generó un vacío de liderazgo dentro del bando sublevado. Este estudio analiza el papel de la facción monárquica en el golpe de Estado, en particular su intento de promover al general Severiano Martínez Anido como líder de un Directorio Militar, una posibilidad sugerida por el propio Emilio Mola y gestionada desde París por el diplomático José María Quiñones de León. A través del análisis de correspondencia diplomática y fuentes hemerográficas, este trabajo presenta como los sectores monárquicos intentaron influir en la configuración del mando militar sublevado en los primeros días de la guerra civil. Aunque Martínez Anido rechazó la propuesta, este episodio revela la compleja lucha interna por el control del bando rebelde. La investigación se estructura en tres partes: (1) la trayectoria de Quiñones de León como intermediario monárquico; (2) la biografía de Martínez Anido y su rol en la dictadura de Primo de Rivera; y (3) los intentos monárquicos de influir en el liderazgo de la sublevación.