El reto de la prevención del blanqueo de capitales en un mundo globalizado
DOI:
https://doi.org/10.5944/rduned.12.2013.11703Palabras clave:
blanqueo de capitales, globalización, Comisión de Prevención del Blanqueo de Capitales e Infracciones Monetarias, blanqueo, GAFI, SEPBLAC, Money Laundering, Globalization, Agency for the prevention of Money Laundering,Resumen
El blanqueo de capitales es uno de los fenómenos de mayor impacto social del mundo contemporáneo. Esta repercusión social es debida, en parte, al ruido mediático del que se hacen eco diariamente los medios de comunicación mundial y a la repercusión económica que tiene este fenómeno en las economías mundiales, minando el amplio abanico que va desde las cuentas de un Estado, hasta la moral individual de las personas, o lo que es lo mismo, afectando tanto a aspectos macroeconómicos como a los microeconómicos. Desde que en los años 80, y unido al tráfico de estupefacientes comenzó a considerarse un problema para los Estados, el blanqueo de capitales ha sido tratado de diversas formas. En un principio se le consideró como un daño colateral, sin dotarle de la capacidad destructiva que verdaderamente tiene, siendo en los últimos veinte años cuando se le ha considerado como una verdadera amenaza para el orden económico establecido. A partir de ese momento un enjambre de leyes, resoluciones, órdenes, instrucciones, etc, emanan de los poderes legislativos de los Estados, que viéndose superados, en muchas ocasiones por sus fronteras físicas y por las facilidades de la globalización, intentan acordar la mejor manera de combatir, con una sola voz, este fenómeno delictivo.
The impact of money laundering in the contemporary world is impressive. In part, media attention has contributed to this impact since world media informs on a daily basis of money laundering cases; at the same time, its economic impact plays a role in the relevance citizens put in this phenomenon. It affects the State accounts as well as the individual well-being of particular subjetcs, not to mention its macroeconomic impact. Money laundering has been treated, together with drug traffic, since the early eighties as a problem for the individual State. At first it was considered a collateral damage, without realizing the really destructive capacity it holds. In the last twenty years its dangers have been realized and a constellation of laws, resolutions, instructions, etc, have been produced by the States. But Status are oftenly unable to fight a phenomenon that trascends fisical borders in a global world.