Las invitaciones a negociar
DOI:
https://doi.org/10.5944/rduned.10.2012.11102Palabras clave:
invitaciones a negociar/acuerdos precontractuales, request for information/precontractual agreements,Resumen
Las invitaciones a negociar son figuras precontractuales de frecuente uso en el tráfico jurídico. Se utilizan con la finalidad de iniciar los tratos preliminares. Son documentos unilaterales que contemplan manifestaciones de deseo de iniciar las negociaciones. Por ello no contienen una verdadera voluntad de vincularse ni contemplan los elementos esenciales del contrato que podría suscribirse al finalizar los tratos preliminares. En consecuencia, no pueden ser consideradas ofertas, ni tampoco contratos. En consonancia con la configuración expuesta, esta institución precontractual constituye un documento que expresa la intención de negociar. En el caso de que sea aceptado supone el inicio de los tratos preliminares. Con ello pueden derivar determinadas obligaciones, como la de negociar de buena fe o la de confidencialidad. Asimismo, puede producir responsabilidad precontractual, cuando haya una legítima confianza en la suscripción de un contrato futuro, se rompan las negociaciones por una causa injustificada y se produzca un daño por tal ruptura. Aunque en el caso de esta figura precontractual, difícilmente concurrirán los mencionados elementos.
Request for information are precontractual agreements that are used frequently. The purpose of these agreements is to start the bargain of a prospective contract. They are unilateral documents which contemplate the intent to start the negotiations. For that reason, they do not contain a real intent to be bound. They also do not have the essential elements of the prospective contract. Consequently, they cannot be considered as offers or contracts. As a consequence of the described concept, this precontractual agreement is a document that expresses the intent to negotiate. In the event that it is accepted, the bargain commences. At this point, some obligations may arise, such as the duty to negotiate in good faith or confidentiality. Furthermore, precontractual liability may arise out of it too, when there is a legitimate expectation that the prospective contract will be executed and a real damage has been provoked due to the unjustified break of the negotiations. But those elements will rarely concur when a request for information is used.