La profesionalización de las Fuerzas Armadas durante la primera legislatura popular

Authors

  • Carlos Navajas

DOI:

https://doi.org/10.5944/hdp.4.2004.41161

Abstract

Este artículo es un estudio del proceso de profesionalización de las Fuerzas Armadas españolas iniciado en 1996 por el gobierno de Aznar. Concretamente, se analiza la segunda parte de la legislatura, la comprendida entre los años 1998 y 2000.Desde una perspectiva temática, los asuntos abordados son los siguientes : el reclutamiento de la tropa y la marinería profesionales, el giro centrista y la sediecinete cocnciaencia de defensa, la "ley de la profesionalización", los presupuestos iniciales del Ministerio de Defensa entre los dos ejercicios antedichos, la financiación creativa de la modernización de las Fuerzas Armadas, la profesionalización de las Fuerzas Armadas y las relaciones cívico-militares, y el Libro blanco de la Defensa. En conclusión, entiendo que la profesionalización de los Ejércitos es un proceso histórico e irreversible que origina una especie de segunda transición que superpone a la primera iniciaa tras la muerte del general Franco en 1975.

Downloads

Download data is not yet available.

References

Barcelona, Crítica, 2000, pp. 243-244.

Barcelona, Plaza y Janés, 2001, pp. 586-587.

Tres Cantos (Madrid), Istmo, 2001, pp. 454-456.

Madrid, Editorial Síntesis, 2002, p. 124.

Madrid, Editorial Fragua, 2002, pp. 251-316. Sobre la primera legislatura popular, véasetambién DÍAZ GIJÓN, José R.; FERNÁNDEZ NAVARRETE, Donato; GONZÁLEZGONZÁLEZ, Manuel Jesús; MARTÍNEZ LILLO, Pedro A., y SOTO CARMONA, Álvaro,Historia de la España actual: 1939-2000. Autoritarismo y democracia, Madrid-Barcelona,Marcial Pons, 2001, especialmente pp. 321-342 y 361-364.

Ver HERRERO BRASAS, Juan Antonio, “El ejército profesional. Una propuesta dereforma”, Claves de Razón Práctica, 66 (octubre 1996), pp. 38-50; LABATUT, Bemard yMARTÍNEZ PARICIO, Jesús, “Espagne: vers l’armée de métier”, Défense Nationale(novembre 1996), pp. 61-68; ALEÑAR GINARD, Martín (coord.), La profesionalización enlos Ejércitos. Un cambio radical de mentalidad para un Estado moderno, Madrid, FundaciónCánovas del Castillo, 1996; SÁNCHEZ-GIJÓN, Antonio, “La Defensa se defiende en lasCortes”, Política Exterior, 56 (marzo-abril 1997), pp. 73-85; FISAS, Vicen?, “Lospresupuestos de defensa para 1997 y el coste de la profesionalización de las FuerzasArmadas”, en AGUIRRE, Mariano (ed.), Anuario CIP 1996-1997. Las guerras modernas:pobreza, recursos, religión, Barcelona. Madrid, Icaria. Centro de Investigación para la Paz,1997, pp. 317-330; GARCÍA DE LA CRUZ, Juan José, “La seudoprofesionalización de latropa”, Claves de Razón Práctica, 82 (mayo 1998), pp. 59-65; ‘Profesionalización de lasFuerzas Armadas: los problemas sociales’, Cuadernos de Estrategia, 98 (abril 1999); y ‘Laprofesionalización de las Fuerzas Armadas: los problemas internos de la institución’,Cuadernos de Estrategia, 104 (octubre 1999).

NAVAJAS ZUBELDIA, Carlos, “‘Para nuestra mejor defensa’. La profesionalización de las Fuerzas Armadas (1996-1998)”, Hispania Nova. Revista de Historia Contemporánea, http://hispanianova.rediris.es/HN0307.htm.

Sobre el “giro” del verano de 1998, véase en particular TUSELL, Javier, El Gobierno de Aznar..., cit., p. 29. * Acerca de esta cuestión entre 1996y 1998, véase NAVAJAS ZUBELDIA, Carlos, ‘“Para nuestra mejor defensa’...”, cit., pp. 10- 1 1 .

“4.500 plazas para el Ejército profesional”, Revista Española de Defensa [RED], 127, (septiembre 1998), pp. 12-13. La suma de 2.500, 1.200 y 775 no es igual a 4.487, sino a 4.475.

“Mejora la respuesta al ejército profesional”, RED, 129 (noviembre 1998), pp. 14-15.

“Defensa convoca 5.800 plazas de soldado profesional para jóvenes”, El País, 15-1-1999, p.22 y “En camino de los 67.500 soldados profesionales”, RED, 131 (enero 1999), pp. 22-23.Por otro lado, Serra añadió que no renunciaba a adelantar el final del Servicio MilitarObligatorio (SMO), que estaba previsto inicialmente para el 1-1-2003.

“El Ejército no podrá cubrir todas las plazas de tropa profesional por falta de candidatos”,El País, 12-11-1999, p. 26 y Cortes Generales, Diario de Sesiones del Congreso de losDiputados. Comisiones, Año 1999, VI Legislatura, 683, pp. 19.752-19.754.

“Hay graves problemas para adelantar el final de la mili”, El País, 12-XI-1998, p. 22.

“6.068 nuevas plazas”, RED, 134 (abril 1999), pp. 28-29.

“Serra atribuye a la guerra la reducción de aspirantes a soldados profesionales”, El País, 14-V-1999, p. 22 y “Defensa sólo logra 1,6 peticiones por cada plaza de soldado”, La Rioja, 19-V-1999, p. 34.

“Un futuro profesional en las FAS”, RED, 136 (junio 1999), pp. 18-19; “Soldados profesionales para el 2000”, RED, 140 (octubre 1999), pp. 20-21; y “La falta de aspirantes impide cubrir las plazas de tropa profesional”, El País, 30-X-1999, p. 30. En el primer artículo citado se afirmaba que el nuevo modelo diseñado por la Ley 17/1999, del Régimen del Personal de las Fuerzas Armadas, «permitirá que entre un 15 y un 20 por ciento de los militares profesionales de tropa y marinería pueda seguir con carácter indefinido en las Fuerzas Armadas» (ivi, p. 19). Sobre la discriminación de las voluntarias a soldados profesionales, ver “Defensa ignora su nueva ley y discrimina a las mujeres que quieren ser soldados profesionales”, El País, 5-X-1999, p. 32; “Defensa rectificará la convocatoria militar que discrimina a las mujeres”, El País, 6-X-1999, p. 25; e “Inercia militar”, El País, 12-X-1999, p. 12. Acerca de la presencia de la mujer en las Fuerzas Armadas, véase “Más del 5%de los militares profesionales son mujeres”, El País, 1-XI-1999, p. 20 y, en especial, FERNANDEZ VARGAS, Valentina, Las militares españolas. Un nuevo grupo profesional, Madrid, Biblioteca Nueva, 1997.

“Defensa aprueba a los aspirantes a soldado con una nota de 0,5 sobre 10”, El País, 2-XII-1999, p. 30.

“Ampliado a 28 años el límite de edad para ser soldado profesional”, El País, 22-1-2000, p.25.

“Defensa suprime la exigencia del graduado escolar y rebaja el cociente intelectual para sersoldado”, El País, 9-II-2000, p. 24; “Ejército de mínimos”, El País, 10-11-2000, p. 12;“Defensa niega el peligro de contratar soldados con un cociente intelectual mínimo”, El País,10-11-2000, p. 26; “El reglamento de la mili limita el uso de las armas a los reclutas con cociente intelectual menor de 86”, El País, 12-11-2000, p. 29; “Lo que sirve para la tropa novale para los mandos”, ibidem; ‘“El soldado menos inteligente obedece mejor’, segúnDefensa”, El País, 13-11-2000, p. 42; “15 minutos para probar la aptitud mental para poseer un arma”, ibidem; “Políticamente incorrecto en Europa”, ibidem; “PSOE e IU critican queDefensa prefiera tropa poco inteligente, pero disciplinada”, El País, 14-11-2000, p. 32; yAGUILAR, Miguel Ángel, “Soldadito ¿español?”, El País, 15-11-2000, p. 24.

“Aznar adelantará a 2001 la supresión de la mili, en contra del criterio de Defensa”, El País, 9-III-2000, p.

Véase “17.500 plazas para las FAS profesionales”, RED, 144 (febrero2000), pp. 96-97.21 ' PEREZ ESTEBAN, Jesús María, ‘“La profesionalización ya está dando sus frutos’”, RED,142 (diciembre 1999), pp. 14-18.

“Serra atribuye a la guerra la reducción de aspirantes a soldados profesionales”, El País, 14-V-1999, p. 22.

Además los soldados y marineros profesionales recién incorporados tardan entre dos y tres meses en recibir su primer sueldo completo (95.572 pesetas), pues durante las diez semanas del periodo de formación sólo reciben 48.182 pesetas al mes (“Un sueldo a 90 días”, El País,2-VII-1998, p. 18).

“La opinión de la tropa profesional”, RED, 125-126 (julio-agosto 1998), p. 15.Acerca de “La doctrina sobre el fomento de la conciencia de la Defensa Nacional” durante los dos primeros años de la legislatura, véase NAVAJAS ZUBELDIA, Carlos, ‘“Para nuestramejor defensa’. . cit., pp. 11-14.

Entre los artículos publicados sobre la conciencia de defensa en la revista oficial delMinisterio, podríamos citar tan sólo el titulado “Marcial González, presidente de la Asociación Riojana de las Milicias Universitarias: ‘Las asociaciones deben actuar coordinadamente’”, RED, 130 (diciembre 1998), pp. 22-23.

“Respaldo presupuestario a la profesionalización”, RED, 128 (octubre 1998), p. 7. En suartículo sobre “La Política de Defensa española en 1998”, Alberto Piris repara también en estedato, aunque de una forma acrítica; ver AGUIRRE, Mariano y FILESI, Teresa (eds.), AnuarioCIP 1999. Guerras en el sistema mundial, Barcelona, Icaria, 1999, p. 163.

Cortes Generales, Diario de Sesiones del Congreso de los Diputados. Comisiones, Año1998, VI Legislatura, 549, p. 15.913.

“Presentación del Proyecto de Ley del Régimen del Personal de las Fuerzas Armadas.Intervención del Ministro de Defensa, Eduardo Serra Rexach, en el Pleno del Congreso de losDiputados del 18 de febrero de 1999”, http://www.mde.es.

España y su defensa en el próximo siglo’. Conferencia del Ministro de Defensa, EduardoSerra Rexach, en el Club Siglo XXI, el día 22 de marzo de 1999”, http://www.mde.es. Sobrela DDN 1/96, ver NAVAJAS ZUBELDIA, Carlos, “Para nuestra mejor defensa”, cit., pp. 2-3.

Ley 17/1999, de 18 de mayo, de Régimen del Personal de las Fuerzas Armadas, BoletínOficial del Estado, 119, 19-V-1999, pp. 18.751-18.797.

GONZA' LEZ, Miguel, “Profesionalización: año 1”, Anuario El País 1999, Madrid,Ediciones El País, 1999, p. 130. Acerca del citado dictamen, ver NAVAJAS ZUBELDIA,Carlos, ‘“Para nuestra mejor defensa’”, cit., pp. 16-17.

Artículo 1, “Objeto y ámbito de aplicación”, apartado 1.

Ibidem. Las referencias reduccionistas al famoso artículo 8 de la Constitución española noson aisladas, pues aparecen también en la Exposición de Motivos. Por el contrario, hubierasido más prudente que la Ley se hubiera referido a la Constitución y al bloque constitucional,que son los que dan su sentido pleno al artículo 8. El apartado 1 de éste establece que lasFuerzas Armadas están constituidas por el Ejército de Tierra, la Armada y el Ejército del Airey que «tienen como misión garantizar la soberanía e independencia de España, defender suintegridad territorial y el ordenamiento constitucional». Una interpretación ultraderechista delartículo 8, en INIESTA CANO, Carlos, “Las Fuerzas Armadas (1975-1985)”, en ABELLA,Rafael, y otros, España diez años después de Franco (1975-1985), Barcelona, Planeta, 1986,pp. 13-14. Iniesta Cano fue uno de los generales “azules” durante la transición democrática.El general de Artillería Alberto Piris recordaba que el artículo 8 «era mil veces citado paratratar de justificar la intervención directa del Ejército en la resolución de otros problemasnacionales, como tan a menudo había escuchado yo en los círculos militares más afines algolpismo», en PIRIS, Alberto, Militar y demócrata, Barcelona, Grijalbo, 1993, p. 138.

Artículos 18, “Plantillas de cuadros de mando”, y 19, “Efectivos de militares profesionalesde tropa y marinería”.

“Gastos de defensa de los países de la OTAN 1975-1998”, Revista de la OTAN, 1(primavera 1999), p. 33, cuadro 6.

En 1992 las tasas de encuadramiento de las Fuerzas Armadas estadounidenses y británicaseran respectivamente del 55% y del 49,6%, en Livre Blanc sur la Défense. 1994, París, Ladocumentation Fran^aise, 1994, pp. 138 y 147. Acerca de esta cuestión, véase NAVAJASZUBELDIA, Carlos, “Para nuestra mejor defensa”, cit., pp. 5-6.

Artículo 95, “Nuevos compromisos”, apartado 1.

Cit. en GARCÍA DE LA CRUZ, “La seudoprofesionalización de la tropa”, cit., p. 61.

«Contracts including reenlistment should not exceed six years. After that it becomes moreand more difficult for ex-soldiers to start a civil career»; VAN DER MEULEN, Jan yMANIGART, Philippe, “Zero Drañ in the Low Countries: The Final Shiñ to the AllvolunteerForcé”, Armed Forces & Society, 2 (Winter 1997), p. 326

Exposición de motivos. Sobre el desarrollo y la aplicación de la Ley 17/1999, véase “LaLey de Personal, en vigor y en marcha”, RED, 135 (mayo 1999), pp. 20-21.

Exposición de motivos y Artículo 1, “Objeto y ámbito de aplicación”. Acerca de lasconsecuencias de la profesionalización de los Ejércitos para las Fuerzas y Cuerpos deSeguridad del Estado durante la primera mitad de la legislatura, véase NAVAJASZUBELDIA, Carlos, “Para nuestra mejor defensa”, cit., p. 14.

Constitución Española, Madrid, Boletín Oficial del Estado, 1983. Sobre el proceso de elaboración de la “ley de la profesionalización”, ver ”Los cadetes ultras o indisciplinados serán expulsados de las academias militares”, El País, 5-VII-1998, p. 25; “El Gobierno promete anticipar ‘al máximo’ el final de la mili, previsto para el año 2003”, El País, 29-VIII-1998, p. 15; “El militar del futuro”, RED, 127 (septiembre 1998), p. 5; ‘“Hemos diseñado una política de personal para las FAS profesionales’”, RED, 127 (septiembre 1998), pp. 6-11;“Defensa prorrogará hasta el año 2002 el contrato de los 50.000 soldados profesionales”, ElPaís, 10-XI-1998, p. 22; “Enmiendas al proyecto de Ley de Personal”, RED, 129 (noviembre1998), pp. 20-21; “PSOE e IU quieren que los jefes militares que ingresaron antes de 1981juren la Constitución”, El País, 17-11-1999, p. 20; “CiU pide que la jura de la Constitución se extienda en el Ejército ‘sin traumas’”, El País, 18-11-1999, p. 21; “Aprobada la ley delEjército profesional sin el apoyo del PNV y CC”, El País, 19-11-1999, p. 24; “El Congreso aprueba la Ley de Personal”, RED, 132 (febrero 1999), pp. 10-12; “El PP elimina obstáculos legales para que los militares puedan ir y volver de la política”, El País, 22-111-1999, p. 25;“Las Cortes aprueban la Ley de Personal”, RED, 134 (abril 1999), p. 27; y “La Ley dePersonal, en vigor y en marcha”, RED, 135 (mayo 1999), pp. 20-21.

“Un Presupuesto acorde con la política de defensa”, RED, 116 (octubre 1997), pp. 6-9.

“Gastos de defensa de los países de la OTAN 1975-1998”, Revista de la OTAN, 1(primavera 1999), p. 32, y FISAS, Viccni;, “El coste del Ejército profesional y los presupuestos de 1998”, en AGUIRRE, Mariano y OSORIO, Tamara (eds.), Anuario CIP1998. Guerras periféricas, derechos humanos y prevención de conflictos, Barcelona, Icaria,1998, p. 224.

“Un Presupuesto acorde con la política de defensa”, cit.

“Respaldo presupuestario a la profesionalización”, RED, 128 (octubre 1998), pp. 6-11

NAVARRO GIL, Enrique G., “Los Presupuestos de Defensa y los dividendos de la paz”,RED, 133 (marzo 1999), pp. 30-33. Respecto a la financiación de los llamados “programasestrella” por el Ministerio de Industria y Energia, este capitán interventor del Gabinete delsecretario de Estado de la Defensa (SEDEF) sostiene que: «Desde un punto de vista contable,la repercusión en el gasto público debe contabilizarse cuando se recibe la contraprestación,por lo que su correcta imputación presupuestaria debe realizarse en ese momento» (ivi, p. 30),es decir, no en 1998 o 1999, como, por el contrario, opinan otros autores. Los créditosaportados por el Ministerio de Industria y Energía para 1999 son exactamente de 198.875millones de pesetas; Cortes Generales, Diario de sesiones del Congreso de los Diputados.Comisiones, Año 1998, VI Legislatura, 549, p. 15.913.

“Respaldo presupuestario a la profesionalización”, cit.

Según la Revista de la OTAN, la estimación de los “gastos de defensa” para 1998 situaban aEspaña (1,3% del PNB) en el antepenúltimo lugar de la Alianza Atlántica, por detrás deCanadá (1,2%) y Luxemburgo (0,9%), en “Gastos de defensa de los países de la OTAN 1975-1998”, Revista de la OTAN, 1 (primavera 1999), p. 32. España es uno de los países de laOTAN que menos gastan en defensa, pero no el que menos lo hace, como, por el contrario,sostenía también el secretario de Estado de la Defensa, Pedro Morenés Eulate: «No hay másque examinar las estadísticas anuales que emite la OTAN para comprobar que España, enrelación con el PIB y en términos OTAN, es el país que dedica menos recursos, víapresupuesto, a la defensa», según “Pedro Morenés, secretario de Estado de la Defensa.Continuidad y rigor”, RED, 128 (octubre 1998), pp. 12-14 (cursiva mía). ¿A qué otras vías seestaba refiriendo el secretario de Estado?, cabe preguntarse. Morenés utilizó el mismoargumento de que España es la nación de la OTAN que menos gasta en defensa en sucomparecencia ante los miembros de la Comisión de Defensa del Congreso de los Diputadosdel 15-X-1998 (Cortes Generales, Diario de sesiones del Congreso de los Diputados.Comisiones, Año 1998, VI Legislatura, 549, p. 15.927).

“Respaldo presupuestario a la profesionalización”, cit. (cursiva mía).

Sobre el lamentable estado en el que se encontraba entonces el Ejército del Aire, véase“Cierre de Manises”, Anuario El País 1999, cit., p. 130, y la comparecencia del Jefe delEstado Mayor del Ejército del Aire ante la Comisión de Defensa del Congreso de losDiputados para informar sobre el proyecto de presupuestos para 1999, que tuvo lugar el 15-X-1998 (Cortes Generales, Diario de Sesiones del Congreso de los Diputados. Comisiones, Año1998, VI Legislatura, 549, pp. 15.951-15.961).

“Respaldo presupuestario a la profesionalización”, cit.

Sobre la “histórica” hipertrofia del Ejército de Tierra respecto a la Armada y el Ejército delAire volveremos en la conclusión de este trabajo.

“Respaldo presupuestario a la profesionalización”, cit.

Ver al respecto la comparecencia del secretario de Estado de Defensa ante la Comisión deDefensa del Congreso de los Diputados de 15-X-1998 (Cortes Generales, Diario de Sesionesdel Congreso de los Diputados. Comisiones, Año 1998, VI Legislatura, 549, p. 15.914).

Según el entonces Jefe del Estado Mayor de la Defensa (JEMAD), «lo bueno sería dedicarun 60 por ciento a material y un 40 a personal» (Cortes Generales, Diario de Sesiones delCongreso de los Diputados. Comisiones, Año 1998, VI Legislatura, n° 549, p. 15.943). Enpalabras de CAYETANO Y GARRIDO, Luis (“Hacia la plena profesionalización de nuestrasFuerzas Armadas”, Revista General de Marina, 235 (noviembre 1998), p. 636), «[e]n losmodernos ejércitos se considera que una distribución del gasto del 50 por 100 para personal ydel 50 por 100 para material es aceptable. Llegar al 40 por 100 para personal y 60 por 100para material es lo deseable» (cursivas mías).cursivas son mías).

VADO, Santiago F. del, “El presupuesto que confirma la recuperación”, RED, 140 (octubre1999), pp. 6-8 y 10-11, y MORENÉS EULATE, Pedro, “Un futuro esperanzador”, p. 9.

IT vi• , p. n7.

Ibidem, y MORENE' S EULATE, Pedro, “Un futuro esperanzador...”, cit., p. 9. Sobre el presupuesto para el año 2000, ver también “Los ejércitos venderán casas y cuarteles por 30.000 millones”, El País, 5-X-1999, p. 32 y “Defensa rectificará la convocatoria militar que discrimina a las mujeres”, El País, 6-X-1999, p. 25.

VADO, Santiago F. del, “En marcha la mayor reforma de las Fuerzas Armadas”, RED, 142 (diciembre 1999), pp. 6-11.

“Defensa tiene comprometidas compras de armamento por casi dos billones de pesetas”, El País, 3-IX-1998, p. 13.

Ibidem.

Ibidem.

DEL CAMPO, Salustiano, Informe INCIPE 1998. La opinión pública española y la política exterior, Madrid, INCIPE, 1998 y “Amplio apoyo social al nuevo modelo de FAS”, RED, 127 (septiembre 1998), pp. 22-23.

“Los españoles mantienen su apoyo a la profesionalización”, RED, 125-126 (julio agosto 1998), pp. 12-14.

DIEZ NICOLÁS, Juan, Identidad nacional y cultura de defensa, Madrid, Síntesis, 1999 y “Las Fuerzas Armadas mejoran su imagen”, RED, 129 (noviembre 1998), pp. 24-27.

“Consejo de Ministros. Serra pide mayor gasto militar en el Libro Blanco de la defensa”, El País, 8-1-2000, p. 18; “Presentado el Libro Blanco de la Defensa”, RED, 143 (enero 2000), pp. 24-27; y “España y su defensa”, RED, 144 (febrero 2000), pp. 84-86. Según informaba El País, el texto del Libro Blanco fue criticado por Izquierda Unida (IU) y CiU, porque había sido elaborado sin contar con el Congreso. En un editorial publicado ese mismo día, decía: «Eduardo Serra compareció también después del Consejo de Ministros para anticipar presuntamente el Libro Blanco sobre la Defensa, pero en su lugar soltó una interminable conferencia acerca de un informe sobre tal documento en preparación. La ausencia de contenido concreto convierte por ahora este ejercicio en un libro en blanco» (“Vísperas electorales”, El País, 8-1-2000, p. 10).

“El Libro Blanco define los intereses nacionales de seguridad. Defensa justifica una acción militar para asegurar el suministro de petróleo”, El País, 29-111-2000, p. 27; “El legado de Serra”, ibidem; “Publicado el Libro Blanco de la Defensa”, RED, 145 (marzo 2000), p. 15.

Los títulos de los capítulos son los siguientes: “El escenario estratégico”, “La respuesta de Occidente al escenario estratégica”, “La política de defensa española”, “Unas fuerzas armadas para el siglo XXI”, “Profesionalización”, “Modernización”, “Racionalizaciéon y adaptación de las estructuras de la Defensa”, y “El soporte económico de la Defensa” (Libro Blanco de la Defensa, Madrid, Ministerio de Defensa, Secretaría General Técnica, Centro de Publicaciones, 2000). La premura con la que al parecer se ha concluido esta obra se puede constatar incluso en su título, pues tanto en la cubierta como en la portada es el de Libro Blanco de la Defensa 2000, mientras que en la ficha catalogada del Centro de Publicaciones del propio Ministerio desaparece esta última cifra.

Este inexplicable olvido contrasta vivamente con la atención prestada a dicho tema por la RED en el dossier sobre la “Conciencia de Defensa” 144 (febrero de 2000), pp. 35-81.

Ivi, p. 74. Sobre las relaciones España-EEUU, ver también las pp. 67 y 77.

Ivi, p. 104. Sin embargo, la cifra de 48.000 cuadros de mando se alcanzará en el año 2014, según “Plantillas de cuadros de mando”, RED, 141 (noviembre 1999), pp. 10-11. Ver, asimismo, “Nuevo Objetivo de Fuerza Conjunto”, RED, 144 (febrero 2000), pp. 92-94.

Libro Blanco de la Defensa, cit., p. 110.

Ivi, p. 87 (cursiva mía).

Ivi, p. 60.

Ivi, p. 171 (cursiva mía).

Ivi, p. 23.

Ivi, p. 172. En una entrevista concedida a la RED, Serra afirmaba que «el Presupuesto de Defensa debería situarse en 1,25 billones de pesetas del 97 aproximadamente para resistir la comparación con los países europeos, para solventar las necesidades de modernización y para lograr un equilibrio entre gastos de personal y gastos de material», en “Eduardo Serra Rexach, ministro de Defensa: ‘En España se puede hablar con total transparencia de las Fuerzas Armadas”, RED, 144 (febrero 2000), pp. 6-13. Dado que en 1997 el presupuesto inicial no financiero del Ministerio de Defensa fue de 869.607 millones de pesetas, lo que equivalió al1,11 del PIB, podemos deducir que el presupuesto defendido por Serra tendría que representaren tomo al 1,59% del PIB.

“Gastos de defensa de los países de la OTAN 1975-1999”, Revista de la OTAN, 48(Primavera/Verano 2000), Suplemento de Documentación, pp. D13-D16.80 Ivi, pp. 145-164. No parece realista que las Fuerzas Armadas españoles estén “desplegadas” simultáneamente en dos teatros en un futuro próximo.

Sobre el Libro Blanco de la Defensa, ver FRIEYRO DE LARA, Beatriz, “Un juicio crítico a El Libro Blanco de la Defensa 2000”, en NAVAJAS ZUBELDIA, Carlos (ed.), Actas del III Simposio de Historia Actual. Logroño, 26-28 de octubre de 2000, Logroño, Gobierno de La Rioja. Instituto de Estudios Riojanos, 2002, pp. 783-805.

El subdirector general de Reclutamiento, general de brigada José Luis ASENSIO GÓMEZ, sostenía hace unos años que la profesionalización «constituye el proceso estructural más ambicioso y complejo de las Fuerzas Armadas en los dos últimos siglos»; en “La profesionalización de las Fuerzas Armadas”, Ejército, 691 (septiembre 1998), p. 26.

“Profesional y moderno”, El País, ll-XII-1996, p. 12. A la inversa, en la comparecencia del ministro de Defensa en el Congreso de los Diputados para explicar el contenido de la nueva Directiva de Defensa Nacional, Eduardo Serra dijo que, según la encuesta del CIS citada más arriba y cuyos resultados no habían sido remitidos todavía al Congreso, el 60% delos españoles estaba dispuesto a que aumentara el presupuesto de Defensa con el objeto de que se pudiera suprimir el SMO (“El ministro de Defensa asegura que la mitad de los españoles daría la vida por la patria”, El País, 8-V-1997, p. 18). El ministro no aclaró en cuánto estaban dispuestos los españoles a que aumentara el presupuesto del ministerio, ni si estaban a favor de que dicho incremento supusiera una merma del gasto social. Finalmente, el ministro presentó los resultados de la encuesta en el Congreso de los Diputados el 21 de mayo(“Los españoles son muy solidarios, algo patriotas y poco militaristas, según una encuesta”,El País, 22-V-1997, p. 2). Es evidente que los encuestados eran también bastante contradictorios, pues, mientras que el 35,6% de los mismos opinaba que los militares no tenían medios suficientes, sólo el 13,6% entendía que el “presupuesto de defensa” fuera insuficiente. Los resultados de esta encuesta fueron ampliamente comentados en “Los españoles apoyan el ejército profesional”, RED, 111 (mayo 1997), pp. 6-9.

En la encuesta citada más arriba, el 71,1% de los entrevistados opinaba que no había ningún país que representara una amenaza militar para España, el 12,9% entendía que sí, y el 16% no sabía o no contestaba. De los que creían en la existencia de una amenaza militar, el 43,7% de los entrevistados citaba a Marruecos; el 11,9%, a los países árabes; el 11,8%, a los Estados Unidos; y el 6,4%, a Rusia (“Los españoles son muy solidarios, algo patriotas y poco militaristas”, cit.).

Véase, por ejemplo, su última comparecencia ante la Comisión de Defensa del Congreso de los Diputados de 1-XII-1999 (Cortes Generales, Diario de Sesiones del Congreso de los Diputados, Comisiones, Año 1999, VILegislatura, 813, pp. 24.192-24.212).

Ver “Documentación. Suplemento especial”, Revista de la OTAN, 1 (primavera 1998), p.16.

Ibidem.

GARCÍA DE LA CRUZ, cit., p. 61.

VAN DER MEULEN Y MANIGART, cit. p. 326.

Ver el apartado 3, “Rasgos básicos del nuevo modelo de tropa y marinería profesionales”, del dictamen de la Comisión Mixta Congreso de los Diputados-Senado (Boletín Oficial de las Cortes Generales. Sección Cortes Generales, VI Legislatura, Serie A: Actividades Parlamentarias, 21-V-1998, 209, pp. 6-7).

“Aznar adelantará a 2001 la supresión de la mili, en contra del criterio de Defensa”, El País, 9-III-2000, p. 21. Sobre esta polémica entre Presidencia del Gobierno y el Ministerio de Defensa, véase también “Serra se resiste a anunciar antes de un año la fecha de finalización de la ‘mili’”, El País, l-XI-1999, p. 20.

VAN DER MEULEN y MANIGART, cit., pp. 325-326.

Sobre la actitud de los partidos políticos ante la profesionalización de las Fuerzas Armadas durante el periodo 1996-1998, ver NAVAJAS ZUBELDIA, Carlos, “Para nuestra mejor defensa”, cit., pp. 14-16.

“España y su defensa en el próximo siglo’. Conferencia del Ministro de Defensa, Eduardo Serra Rexach, en el Club Siglo XXI, 22-111-1999”, http://www.mde.es.

La hipertrofia del Ejército de Tierra es sin duda heredera de su función principal durante los regímenes liberales y dictatoriales de los siglos XIX y XX: la de «ser prácticamente unejército de ocupación nacional», en palabras textuales del propio Eduardo Serra (“La recuperación de la confianza”, El País, 6-1-1999, p. 9). Un año después, publicó en el mismo diario el artículo “La nueva defensa, la defensa de Europa” (6-1-2000, p. 11). Serra se despidió del cargo de ministro de Defensa después de haber protagonizado alguna que otra polémica acerca, precisamente, de las funciones a desempeñar por las Fuerzas Armadas (ver “Duras críticas a Serra por atacar al nacionalismo e invocar al Ejército como garante de la unidad”, El País, 11-1-2000, p. 14; “España”, El País, 12-1-2000, p. 10; “Almunia emplaza a Aznar a confrontar en televisión sus proyectos para España”, El País, 12-1-2000, p. 15; y“Serra afirma que el Ejército no intervendría para frenar una secesión”, El País, 13-1-2000, p.16).

Published

2004-12-01

How to Cite

Navajas, C. . (2004). La profesionalización de las Fuerzas Armadas durante la primera legislatura popular. Historia del Presente, (4), 184–209. https://doi.org/10.5944/hdp.4.2004.41161

Issue

Section

The Past of the Present